Transformados

Al estudiar las escrituras a la luz de Cristo y sin velos, podemos comprender y ver que las escrituras se tratan de Él y que ellas dan testimonio de esto. Nuestra vida es beneficiada cuando estudiamos y meditamos las escrituras; nuestra mente, pensamiento, voluntad y corazón son mudados y trasformados a la misma imagen de nuestro redentor.

Es por esto que debemos meditarlas y aprenderlas para que nuestros pensamientos sean afectados por su luz, nuestra cosmovision y la manera de comprender el mundo, aun nuestras tradiciones paganas y mundanas se ven derrocadas al levantarse la verdad en nuestros corazones. Su luz resplandeciendo en nuestros corazones y mente, disipa todas nuestras tinieblas y nos ayudara a no adaptarnos ni mucho menos pensar como este mundo piensa y siente.

Su palabra nos trasformara y renovara nuestros pensamientos y ya no haremos lo que antes hacíamos, ya no pensaremos en tinieblas como antes pensábamos.
Al sumergirnos en las profundidades de Cristo tenemos toda esperanza de cambio y de transformación.


Romanos 12:2

No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta

Comentarios

  1. Hay una transformación mayor. La de 1 Corintios 15;51-53. La transfiguración fina. Refiriéndose al hijo del hombre como Moisés y Elías con Jesús en la nuve la presencia de Dios

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